Sabías que los pósit acaban cayendo
y preferiste clavarme
tus notas de colores
Ahora en el tablón municipal un bando
anuncia
mi desahucio
y una esquela en blanco espera que
borre tu número del móvil.
No hacen falta más chinchetas
un graffiti que aún escurre luto
reclama a spray en grito
“¡viva la libertad de decepción!”
.
.
Uaaaaauuuu!! Mola tu literatura, Lilith. Vendré más veces por aquí.
ResponderEliminarBienvenido al destierro edénico, Josep... aunque no lo parezca este rincon es cálido.
Eliminar