Septiembre
sigue siendo amarillo
y escucha en silencio
el cuento de las escamas del sol
al amanecer.
Un viernes de membrillos y ciruelas
tiñe las casas de sueño
nubla el tiempo
y hace renacer del olvido
el sonido del viento.
En el vino derramado
se vacía la tristeza
cayendo las palabras al suelo
crujiendo bajo tus pies
cuando te alejas...
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